El agua es muy importante para la salud de tu corazón, ya que mantener el cuerpo hidratado ayuda a este órgano a bombear sangre más fácilmente hacia los músculos. Es doblemente importante cuando las temperaturas se elevan y el calor se siente durante varias horas del día.

La deshidratación, por otro lado, puede causar graves problemas de salud que puede traducirse en síntomas como los pies hinchados, dolores de cabeza o algo más peligroso como un golpe de calor.

¿Cuál es el índice de agua necesario?

Las condiciones climáticas, la ropa y los hábitos de ejercicio son importantes para determinar cuánta agua debe tomar un individuo para mantenerse hidratado. Por ejemplo, una persona que transpira mucho deberá tomar más agua que una que no transpira tanto. Si el individuo padece de alguna condición médica como la diabetes o alguna enfermedad cardiovascular también es posible que necesite tomar más agua de lo normal.

¿Cómo saber cuándo debo tomar agua?

La sed podría parecer un indicador suficiente, pero no. De hecho, cuando se siente sed es que el cuerpo ya está deshidratado. Para evitarlo es necesario poner atención a otros aspectos.

La forma más sencilla de saber si se necesita más agua es poniendo atención a la orina: si es clara y pálida, el nivel de hidratación es bueno; si es más oscura, es necesario beber más fluidos.

Agua sobre otras opciones

El agua es la mejor forma de hidratarse. No a través de agua pura, sino con frutas y verduras que tengan alto contenido de agua (como el pepino o la jícama). Algunas personas se hidratan también con electrolitos, pero considera que estas bebidas son para atletas de alto rendimiento y suelen tener azúcares y calorías añadidas, por lo que, si no se hace ejercicio vigorosamente, varias horas al día, es recomendable que no se consuman.

Es altamente recomendable evitar jugos o bebidas azucaradas cuando se busca hidratación, lo mismo que bebidas con cafeína, ya que este funciona como diurético.

Pon atención a las señales y mantente hidratado

Hidratarse correctamente le ahorra mucho trabajo a tu corazón y te ayuda a mantenerte saludable. Aquellas personas mayores de 50 años, con sobrepeso o con alguna enfermedad del corazón deben consultar con su médico y tener precauciones extra.